Panamá, 3 feb (PL) Organizaciones ambientalistas y de la sociedad civil coinciden hoy en los cuestionamientos a la reforma minera en Panamá, impulsada por el gobierno con el argumento de apoyar el desarrollo del sector.
Decenas de agrupaciones ya expresaron sus objeciones al proyecto por considerar que las consultas han sido insuficientes durante su elaboración, además de abogar por una discusión más amplia.
La iniciativa gubernamental provocó también protestas de estudiantes de la Universidad de Panamá, campesinos y grupos indígenas.
Los reclamos buscan además que se tomen en cuenta los aportes de la sociedad civil para establecer las modificaciones correspondientes a las normativas.
Bajo esas presiones, la propuesta de cambios al Código Minero ingresa este jueves en la agenda de debates de la Asamblea Nacional, tras recibir un primer aval en la Comisión de Comercio del legislativo.
De acuerdo con evaluaciones de la Cámara Minera de Panamá, el potencial de los yacimientos en el país podría superar los 220 mil millones de dólares.
La atención se concentra con énfasis en productos como el oro y cobre, los cuales muestran una tendencia al encarecimiento en los últimos meses.
Sin embargo, los ambientalistas consideran que es más factible apoyar actividades menos contaminantes, entre ellas el turismo ecológico, la agricultura y ganadería sostenibles.
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