jueves, 24 de diciembre de 2009

Defensoría del Pueblo presenta balance de su labor en centros penitenciarios


Prensa DP
La Defensoría del pueblo realizó este jueves un balance general de la actuación defensorial desde su programa bandera Haciendo Comunidad con los Derechos Humanos (sub-programa Comunidad Penitenciaria), el cual permite la construcción de planes de trabajo colectivos en materia de Derechos Humanos, con el propósito de garantizar a los internos e internas condiciones de vida más dignas dentro de los centros de privación de libertad.

En este sentido, la institución defensorial comenzó en el año 2008 la conformación y juramentación de los Consejos para la Defensa de los Derechos Humanos en los Centros Penitenciarios, conformado por personas privadas de libertad y sus familiares, representantes del Ministerio del Poder Popular Para las Relaciones Interiores y Justicia, del Ministerio Público, la Defensa Pública, Poder Judicial, la Alcaldía, la Gobernación de la región, entre otros.

De esta manera, la Defensoría del Pueblo enfila todos los mecanismos de defensa de los derechos humanos en beneficio de la población penal, a fin de que todas las instituciones con competencia en la materia penitenciaria garanticen a todos los internos e internas el pleno goce de sus derechos y se optimicen mecanismos para la celeridad procesal y el otorgamiento de medidas alternativas y beneficios que legítimamente les corresponda.

Este año, los Consejeros y Consejeras Penitenciarios elaboraron Planes de Gestión Penitenciario en Derechos Humanos que incluyó el diagnóstico participativo basado en la jerarquización de problemas tanto de los penados y penadas como de los procesados y procesadas. La idea es facilitar una metodología para poder ponderarlos y, en el corto plazo, ir dándole respuestas a las demandas de los mismos, abriendo espacios de diálogo sobre la situación de los derechos humanos en el sistema penitenciario venezolano y generando aportes y compromisos de todas las instituciones del Estado.

Cabe destacar que, gracias a la buena aceptación que ha tenido el programa dentro de los recintos penitenciarios, también comenzó a desarrollarse en el 2009 un Plan Nacional de Formación en Derechos Humanos para las personas privadas de libertad, en cual permite generar procesos educativos desde la propia población penal con una concepción pluralista y humanista en el marco de los principios de la democracia participativa y protagónica

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